Salmos 40:2
1 Pacientemente esperé a Jehová,
Y se inclinó a mí, y oyó mi clamor.
2 Y me hizo sacar del pozo de la desesperación, del lodo cenagoso;
Puso mis pies sobre peña (Roca – Jesucristo), y enderezó mis pasos.
Isaías 30:15
15 Porque así dijo el Señor, el Santo de Israel: En descanso y en reposo seréis salvos; en quietud y en confianza será vuestra fortaleza.
Salmos 46:10a
10 Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;
Salmo 37:7a
7 Guarda silencio ante Jehová, y espera en él.
EJEMPLOS DE DESESPERACIÓN EN LA BIBLIA
En el Evangelio de Lucas (Lc 10,38-42, se menciona que cuando Jesús estuvo predicando en Galilea, se hospedó en la casa de Marta. Marta se dedicó a arreglar la casa, y a preparar la cena; María, en cambio, «se sentó a los pies del Señor y se quedó escuchando su palabra» (Lucas, 10,39). Marta, viendo esto, dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para atender? Dile que me ayude.» (Lucas 10,40).
“…pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz.” Romanos 8:6.
Lucas 10:41-42
41 Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas.
42 Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada.
Marcos 4:35-41
35 Aquel día, cuando llegó la noche, les dijo: Pasemos al otro lado.
36 Y despidiendo a la multitud, le tomaron como estaba, en la barca; y había también con él otras barcas.
37 Pero se levantó una gran tempestad de viento, y echaba las olas en la barca, de tal manera que ya se anegaba.
38 Y él estaba en la popa, durmiendo sobre un cabezal; y le despertaron, y le dijeron: Maestro, ¿no tienes cuidado que perecemos?
39 Y levantándose, reprendió al viento, y dijo al mar: Calla, enmudece. Y cesó el viento, y se hizo grande bonanza.
40 Y les dijo: ¿Por qué estáis así amedrentados? ¿Cómo no tenéis fe?
41 Entonces temieron con gran temor, y se decían el uno al otro: ¿Quién es éste, que aun el viento y el mar le obedecen?
Mateo 14:22-33
22 En seguida Jesús hizo a sus discípulos entrar en la barca e ir delante de él a la otra ribera, entre tanto que él despedía a la multitud.
23 Despedida la multitud, subió al monte a orar aparte; y cuando llegó la noche, estaba allí solo.
24 Y ya la barca estaba en medio del mar, azotada por las olas; porque el viento era contrario.
25 Mas a la cuarta vigilia de la noche, Jesús vino a ellos andando sobre el mar.
26 Y los discípulos, viéndole andar sobre el mar, se turbaron, diciendo: !!Un fantasma! Y dieron voces de miedo.
27 Pero en seguida Jesús les habló, diciendo: !!Tened ánimo; Yo Soy, no temáis!
28 Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas.
29 Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús.
30 Pero al ver el fuerte viento (CONTEMPLAR – PUSO SU ATENCIÓN EN – PIERDE EL DOMINIO PROPIO.), tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: !!Señor, sálvame!
31 Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: !!Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?
32 Y cuando ellos subieron en la barca, se calmó el viento.
33 Entonces los que estaban en la barca vinieron y le adoraron, diciendo: Verdaderamente eres Hijo de Dios.
¿Qué necesitamos de Dios?
1 Pedro 3:4
… el incorruptible ornato de un espíritu Afable y Apacible, que es de gran estima delante de Dios.
Proverbios 25:28
28 Como ciudad derribada y sin muro es el hombre cuyo espíritu no tiene rienda.
Santiago 1:19
19 Por esto, mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse;
1 Pedro 5:6-10
6 Humillaos, pues, bajo la poderosa mano de Dios, para que él os exalte cuando fuere tiempo;
7 echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.
8 Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar;
9 al cual resistid firmes en la fe, sabiendo que los mismos padecimientos se van cumpliendo en vuestros hermanos en todo el mundo.
10 Mas el Dios de toda gracia, que nos llamó a su gloria eterna en Jesucristo, después que hayáis padecido un poco de tiempo, él mismo os perfeccione, afirme, fortalezca y establezca.
Salmos 37:5
5 Encomienda a Jehová tu camino,
Y confía en él; y él hará.