1 Corintios 6:19-20 NVI
[19] ¿Acaso no saben que su cuerpo es templo del Espíritu Santo, quien está en ustedes y al que han recibido de parte de Dios? Ustedes no son sus propios dueños; [20] fueron comprados por un precio. Por tanto, glorifiquen con su cuerpo a Dios.
Juan 4:20, 20-21, 23-24 NVI
[20] Nuestros antepasados adoraron en este monte, pero ustedes los judíos dicen que el lugar donde debemos adorar está en Jerusalén.
[20] Nuestros padres adoraron en este monte, y vosotros decís que en Jerusalén es el lugar donde se debe adorar. [21] Jesús le dijo: Mujer, créeme, que la hora viene cuando ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre.
[23] Mas la hora viene, y ahora es, cuando los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad; porque también el Padre tales adoradores busca que le adoren. [24] Dios es Espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren.
Juan 2:19-21 NVI
[19] —Destruyan este templo —respondió Jesús—, y lo levantaré de nuevo en tres días. [20] Ellos respondieron: —Tardaron cuarenta y seis años en construir este Templo, ¿y tú vas a levantarlo en tres días? [21] Pero el templo al que se refería era su propio cuerpo.
Hebreos 12:22, 18, 23-24 NVI
[22] Por el contrario, ustedes se han acercado al monte Sión, a la Jerusalén celestial, la ciudad del Dios viviente. Se han acercado a millares y millares de ángeles, a una asamblea gozosa,
[18] Porque no os habéis acercado al monte que se podía palpar, y que ardía en fuego, a la oscuridad, a las tinieblas y a la tempestad,
[23] a la congregación de los primogénitos que están inscritos en los cielos, a Dios el Juez de todos, a los espíritus de los justos hechos perfectos, [24] a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel.
1 Pedro 2:4-5, 9 NVI
[4] Cristo es la piedra viva, desechada por los seres humanos, pero escogida y preciosa ante Dios. Al acercarse a él, [5] también ustedes son como piedras vivas, con las cuales se está edificando una casa espiritual. De este modo llegan a ser un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales que Dios acepta por medio de Jesucristo.
[9] Pero ustedes son descendencia escogida, sacerdocio regio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, para que proclamen las obras maravillosas de aquel que los llamó de las tinieblas a su luz admirable.
Juan 3:5-6 NVI
[5] —Te aseguro que quien no nazca de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios —respondió Jesús—. [6] Lo que nace del cuerpo es cuerpo; lo que nace del Espíritu es espíritu.
Juan 3:33-34 RVR1960
[33] El que recibe su testimonio, este atestigua que Dios es veraz. [34] Porque el que Dios envió, las palabras de Dios habla; pues Dios no da el Espíritu por medida.
Efesios 4:3-4, 6, 23-24 RVR1960
[3] solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz; [4] un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación;
[6] un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.
[23] y renovaos en el espíritu de vuestra mente, [24] y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.