Juan 8:31-47 DHH94I


[31] Jesús les dijo a los judíos que habían creído en él: —Si ustedes se mantienen fieles a mi palabra, serán de veras mis discípulos; [32] conocerán la verdad, y la verdad los hará libres. [33] Ellos le contestaron: —Nosotros somos descendientes de Abraham, y nunca hemos sido esclavos de nadie; ¿Cómo dices tú que seremos libres? [34] Jesús les dijo: —Les aseguro que todos los que pecan son esclavos del pecado. [35] Un esclavo no pertenece para siempre a la familia; pero un hijo sí pertenece para siempre a la familia. [36] Así que, si el Hijo los hace libres, ustedes serán verdaderamente libres. [37] Ya sé que ustedes son descendientes de Abraham; pero quieren matarme porque no aceptan mi palabra. [38] Yo hablo de lo que el Padre me ha mostrado; así también ustedes, hagan lo que del Padre han escuchado. [39] Ellos le dijeron: —¡Nuestro padre es Abraham! Pero Jesús les contestó: —Si ustedes fueran de veras hijos de Abraham, harían lo que él hizo. [40] Sin embargo, aunque les he dicho la verdad que Dios me ha enseñado, ustedes quieren matarme. ¡Abraham nunca hizo nada así! [41] Ustedes hacen lo mismo que hace su padre. Ellos le dijeron: —¡Nosotros no somos hijos bastardos; tenemos un solo Padre, que es Dios! [42] Jesús les contestó: —Si de veras Dios fuera su padre, ustedes me amarían, porque yo vengo de Dios y aquí estoy. No he venido por mi propia cuenta, sino que Dios me ha enviado. [43] ¿Por qué no pueden entender ustedes mi mensaje? Pues simplemente porque no pueden escuchar mi palabra. [44] El padre de ustedes es el diablo; ustedes le pertenecen, y tratan de hacer lo que él quiere. El diablo ha sido un asesino desde el principio. No se mantiene en la verdad, y nunca dice la verdad. Cuando dice mentiras, habla como lo que es; porque es mentiroso y es el padre de la mentira. [45] Pero como yo digo la verdad, ustedes no me creen. [46] ¿Quién de ustedes puede demostrar que yo tengo algún pecado? Y si digo la verdad, ¿por qué no me creen? [47] El que es de Dios, escucha las palabras de Dios; pero como ustedes no son de Dios, no quieren escuchar.